Centla se ha convertido en un importante destino eco-turístico. Desde la Reserva de la Biosfera de los Pantanos de Centla hasta las playas de Miramar, Victoria, Bocana, Pico de Oro y Bosque, es un gran imán para turistas locales, regionales, nacionales e internacionales.
Para los recorridos por la reserva y sus alrededores se recomienda portar ropa fresca y ligera y sombrero o gorra, además de bloqueador solar, pues gran parte de los trayectos son en plena exposición a los rayos solares. Aunque hay estar preparados para los eventuales chubascos.
El calzado deberá ser siempre cómodo pues los trayectos son extensos; en el caso de recorrido por la zona urbana de Frontera y otras pequeñas ciudades es preferible el uso de zapatos cerrados, y para las visitas a los alrededores y áreas de naturaleza, se prefiere el calzado abierto, sandalias o huaraches.
Las botellas con agua serán una buena compañía en estos recorridos, aunque dentro de la zona urbana hay un gran número de tiendas y expendios que ofrecen diversos servicios, alimentos, artesanías, materiales turísticos, etcétera.
Hay hoteles con los servicios básicos, así como pequeños centros ecoturísticos con cabañas y bungalows. Sin embargo, son pocos por lo que es recomendable reservar con anticipación el hospedaje, sobre todo si se quiere visitar Centla en temporada vacacional o en algún puente o fin de semana largo.
Se pueden realizar varias recorridos entre los manglares de la zona, en lancha o canoa. La mayor parte de ellos llegan a los principales centros de atracción como el faro, el Museo de la Navegación, el Centro de Interpretación Uyotot-Já, los Tres Brazos, la torre de observación de aves, la exaduana marítima, o el desarrollo ecoturístico Punta Manglar.