La ciudad de Culiacán es moderna, cosmopolita y cuenta con la infraestructura urbana necesaria y todos los servicios turísticos para garantizar una visita agradable. La oferta hotelera de Culiacán es amplia en todas las categorías, de una a cinco estrellas, así como la variedad de restaurantes y establecimientos de alimentos.
La ciudad tiene una estupenda infraestructura turística, con hoteles, restaurantes, centros financieros, comerciales, de entretenimiento y diversión, proveedores de servicios, etc. Sin embargo, a pesar del gran número de habitaciones, villas, cabañas para todos los presupuestos, es conveniente que se reserve con antelación suficiente para asegurar el hospedaje, sobre todo en vacaciones, fines de semana largos, puentes, etcétera.
La oferta hotelera de Culiacán es suficiente, variada y en permanente crecimiento. Hay desde hoteles de lujo, campos de golf, restaurantes internacionales, etc., hasta hoteles boutiques, villas ecoturísticas y un gran número de establecimientos amables y respetuosos con el ambiente, de todos precios y categorías.
Es una ciudad activa, con una dinámica vida nocturna. Gracias a su crecimiento turístico, Culiacán cuenta hoy con una amplia gama de alternativas de diversión por la noche, desde restaurantes, bares, discotecas, espectáculos, pubs, etc. Se recomienda atender todas las indicaciones de seguridad de las autoridades, así como no salir de las zonas turísticas.
En los alrededores de Culiacán hay un gran número de balnearios, centros acuáticos de recreación, spas, clínicas de relajamiento con aguas termales, etc. Culiacán se ha convertido en un foco de atención para quienes toman un descanso revitalizador y energizante.
Para todos los recorridos se recomienda portar ropa fresca y ligera y sombrero o gorra; aunque durante el día predomina el buen clima, es frecuente que por la tarde descienda la temperatura. Si se piensa acudir a los centros de recreación y balnearios que hay en Culiacán hay que tener a la mano los trajes de baño, toallas e implementos necesarios.
El calzado deberá ser siempre cómodo pues los trayectos son extensos; hay quien prefiere el uso de zapatos cerrados o botas, y quien prefiere para las visitas a áreas de naturaleza, el calzado abierto, sandalias o huaraches.
Las botellas con agua serán una buena compañía en estos recorridos, aunque en toda la zona urbana y las principales áreas de playa hay un gran número de tiendas y expendios que ofrecen diversos servicios, alimentos, artesanías, materiales turísticos, etcétera.
En Culiacán se puede comer muy bien. La gastronomía local depende, lógicamente, de la carne y los productos del mar. El platillo más típico y popular es el chilorio, con carne desmenuzada, chile pasilla, ajo y especias, pero también hay machacas, borrego tatemado, los mixcocos de frijol, los tamales barbones, el menudo blanco, las enchiladas del suelo, etc. y postres como las melcochas, ponteduros, tacuarines, coyotas, pinturitas, etcétera.
De las cercanas playas a Culiacán llegan los pescados y mariscos, que se degustan en establecimientos de gran variedad en cuanto a menú y calidad. Hay pescados zarandeados, chicharrón de camarón, albóndigas de camarón, fuentes de mariscos, etc. Hay restaurantes al aire libre, al igual que en los centros comerciales, hoteles, avenidas principales y, desde luego, en los mercados. Es famosa la ruta gastronómica de Bacurimi por la variedad de sus platillos típicos y lo agradable del recorrido.