La Autopista del Sol, que comunica al puerto de Acapulco con la Ciudad de México es una autopista de cuota que reduce sensiblemente el tiempo del trayecto, que puede llegar a hacerse en menos de cuatro horas. Tiene en su recorrido cinco casetas de cobro y presenta frecuentes deslaves que provocan que aumente el riesgo y disminuya la velocidad en el trayecto. Es necesario tomar en cuenta esta circunstancia, que se usualmente se presenta.
Durante los últimos tiempos, el puerto de Acapulco ha sido escenario de algunos hechos violentos; sin embargo, éstos se han registrado fuera de la zona turística. A partir de ellos, Acapulco es vigilado por fuerzas del orden, para evitar nuevos eventos violentos; sin embargo, es conveniente observar todas las indicaciones de seguridad, como no transitar por zonas no turísticas, no llevar consigo documentación o fuertes sumas de dinero, evitar los sitios solitarios, etcétera.
En Acapulco las áreas turísticas modernas están claramente diferenciadas de las zonas habitacionales de la población, no así las zonas del turismo tradicional, con el que comparte algunas colonias y avenidas, por lo que, principalmente en estas zonas, es conveniente tomar el servicio de guías turísticos para evitar confusiones y pérdidas de tiempo.
Los fines de semana y las temporadas vacacionales son momentos en los que el tráfico en Acapulco se satura. La Costera Miguel Alemán, las calles de la zona centro, los puentes y túneles se convierten en largas filas de automóviles y los traslados, aunque sean cortos pueden durar mucho tiempo. Se tienen programadas grandes obras viales para aliviar este problema, pero mientras tanto, no hay más que tomarlo en cuenta y planear las actividades con el tiempo suficiente.
Acapulco está al alcance de todos los bolsillos. Hay hoteles, restaurantes, tiendas, establecimientos de lujo a nivel internacional, pero también los hay de nivel popular; esto provoca la pluralidad del tipo de turismo, sobre todo en las playas, que son zonas federales. Esta pluralidad permite que Acapulco siga siendo un destino familiar para el turismo nacional.
Hay que tomar en cuenta que Acapulco ha crecido tanto durante los últimos tiempos que ahora se divide en tres grandes zonas turísticas: Acapulco Tradicional, Acapulco Dorado y Acapulco Diamante. El traslado en ellas, privado y público, es fácil y accesible; pero, para ir de una zona a otra se requiere de tiempo suficiente pues, a pesar de que son distancias cortas, suele haber mucho tráfico y las tarifas de taxis son altas.
Los atractivos turísticos de Acapulco son múltiples; los hay para niños, parejas, familias enteras; existen atractivos naturales, culturales, comerciales, etc. El principal, desde luego, es el mar, ya sea reposando en la playa y disfrutando de la vista en las alturas; se puede gozar de Acapulco sin salir del hotel o yendo sólo a la playa, pero si se quieren tener actividades en la mañana, tarde y noche, es conveniente planear esas salidas por la gran cantidad de alternativas que se ofrecen a los visitantes.
Durante los fines de semana y las temporadas vacacionales en Acapulco hay una gran cantidad de conciertos, recitales, espectáculos, eventos artísticos y culturales, en los muchos foros que hay en el puerto, por lo que se recomienda consultar las carteleras con antelación para aprovecharlos; todos se anuncian con oportunidad.