Yuriria, originalmente Yuririhapúndaro, quiere decir lago de sangre, en lengua purépecha, quizá haciendo referencia a un lago en un cráter volcánico, lo que le daría una tonalidad rojiza al agua. Fue fundada en un territorio de gran fertilidad y agua en abundancia, que han sido sus características naturales a lo largo de la historia.
La espectacular Laguna de Yuriria es un lago artificial. Los indígenas dirigidos por Fray Diego de Chávez construyeron un canal a partir del Río Grande de Toluca (hoy Río Lerma) para llevar agua hacia los pantanos vecinos a Yuririhapúndaro, que causaban muchos problemas de salud. El Jueves de Corpus de 1550 se abrieron las compuertas y se formó la inmensa laguna. Se considera la primera gran obra hidráulica de la Nueva España.
En la laguna se pueden practicar los paseos en lancha y la pesca deportiva; en ella sobresalen varias islas, algunas de las cuales se pueden visitar, como la del Fuerte de Liceaga. Las otras islas son: Peñón de Vargas, El Patol, Sacopúndaro, San Pedro, Tíndaro, Characo, Puranque, Las Cabras y Mario. En algunas de ellas se han establecido áreas de protección para preservar los ecosistemas.
La ciudad de Yuriria, comercial y económicamente, se ha unido a las ciudades cercanas de Moroleón y Uriangato, para crear una zona metropolitana única. En conjunto forman la quinta zona más poblada del estado de Guanajuato.
El principal atractivo de Yuriria es el imponente convento-fortaleza de San Agustín, construido a partir de 1550. Es uno de los ejemplos más bellos de las construcciones de tipo medieval que fueron sembrando los misioneros por las tierras de la Nueva España conforme avanzaban en su tarea de evangelización. Su buen estado de conservación permite apreciar su majestuosidad.
Otros grandes atractivos de Yuriria, la mayor parte de carácter religioso, son: la iglesia del Señor de la Salud, en donde se venera su milagrosa imagen; la capilla de Santa María, erigida antes del convento-fortaleza de San Agustín, a orillas de la laguna; y las notables iglesias de Nuestra señora del Perpetuo Socorro de los Pobres, la Preciosa Sangre de Cristo, Esquipulitas, San Antonio, la Purísima o el templo del Santo Sepulcro.
En una laguna abierta en el cráter de un volcán extinto, llamada La Joya se erigió un santuario de la Virgen de Guadalupe, pues se dice que la imagen se apareció en los peñascos que rodean este lago-cráter. Es una visita singular que forma parte de las tradiciones en Yuriria.
El centro histórico de Yuriria, así como la zona turística son núcleos pequeños y bien delimitados, de forma que pueden recorrerse en poco tiempo y sin necesidad de recurrir a los servicios de guías de turistas, aunque hay muchas personas y agencias que ofrecen sus conocimientos y servicios.
Por el contrario, es conveniente hacerse acompañar de un guía, o bien tener a mano una guía impresa, que apoye el recorrido por el templo y el convento de San Agustín. Sus dimensiones, riqueza y complejidad de estilos se aprecian mejor con un apoyo de esta naturaleza.
Para los recorridos se recomienda portar ropa fresca y ligera y sombrero o gorra, además de bloqueador solar, pues gran parte de los trayectos son en plena exposición a los rayos solares.
El calzado deberá ser siempre cómodo pues los trayectos son extensos y las calles empedradas; en el caso de recorrido por la zona urbana es preferible el uso de zapatos cerrados, y para las visitas a los alrededores y áreas de naturaleza, se prefiere el calzado abierto, sandalias o huaraches.
Las botellas con agua serán una buena compañía en estos recorridos, aunque dentro de la zona urbana hay un gran número de tiendas y expendios que ofrecen diversos servicios, alimentos, artesanías, materiales turísticos, etcétera.