Toluca en algún momento de su historia fue llamada la pequeña Francia, por la arquitectura de estilo afrancesado que la distinguía. Sin embargo, ahora es una ciudad cosmopolita, con un perfil similar al de muchas ciudades modernas y un constante crecimiento, que se expresa en continuas obras de infraestructura y problemas viales.
Su intensa actividad industrial ha hecho de Toluca un foco de atracción para miles de personas y familias que han llegado a residir en la capital del Estados de México. La mancha urbana, es cada vez más amplia, así como el crecimiento de núcleos vecinos, como Metepec, que se multiplican hacia todos los puntos cardinales y hacen que Toluca sea cada vez más extensa. Hay algunos puntos de la ciudad, sobre todo al norte, que se han vuelto sumamente inseguros.
Toluca es un gran centro industrial. Las fábricas establecidas en la ciudad se dedican, principalmente, a la producción y distribución de bebidas, alimentos procesados, textiles, automóviles, productos eléctricos, químicos y farmacéuticos. La industria automotriz ocupa un lugar importante en la economía del municipio y de la región y eso se nota en su imagen urbana.
Durante los últimos tiempos se ha multiplicado el ciclismo urbano, gracias a un convenio firmado con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la presión de los habitantes de la ciudad y los constantes problemas de tránsito. Está en construcción una red de ciclovías.
Toluca no tiene un trabajo artesanal que la caracterice, pero es el centro al que llegan muchos artesanos y gremios a comercializar sus productos. La gran variedad de objetos textiles, de madera, piedras y su calidad permite que en Toluca se encuentren piezas y productos para todos los presupuestos. Se recomienda dedicar tiempo para hacer una buena selección y para regatear en los precios, que suele ser una costumbre.
Es una ciudad erigida en el Valle de Toluca, una inmensa planicie rodeada de montañas, particularmente cerca del Nevado de Toluca, una de las principales elevaciones de la república y centro de atractivo y diversión para miles de turistas que toman a la ciudad de Toluca como escala obligada.
En Toluca se puede comer muy bien. Su cosmopolitismo, así como su modernidad garantizan una amplia oferta gastronómica; se pueden encontrar desde restaurantes con menú internacional hasta los que se especializan en cocina mexicana y regional. La oferta es muy extensa, no solamente en la variedad de los platillos sino también en sus precios y categorías. Por supuesto, hay que disfrutar del manjar típico de la ciudad que es el chorizo.
Se dice que en Toluca nació el “taco placero”. Según cuenta la leyenda, los cargadores en la plaza del mercado compraban tortillas y, mientras iban cargando recorrían los puestos y los locatarios les daban algo de lo que vendían: algunos nopales, otros jitomates, otros carnitas, cilantro, chicharrón, etc. y así iban formando sus tacos. Comer en sus mercados sigue siendo una costumbre arraigada.
Por su extensión y la gran cantidad de edificios y lugares interesantes, los recorridos suelen ser largos, así es que es conveniente dedicarle el tiempo necesario, y más si se quieren hacer compras de recuerdos, artesanías, comestibles, etc. Toluca tiene muchos sitios de interés, que requieren de tiempo para su apreciación.
Para los recorridos se recomienda portar ropa fresca y ligera y sombrero o gorra, además de bloqueador solar, pues gran parte de los trayectos son en plena exposición a los rayos solares. El calzado deberá ser siempre cómodo pues los trayectos son extensos.
Aunque el clima de Toluca es templado, hay que estar prevenidos para recibir los bruscos cambios de temperatura que se registran al entrar la noche y al amanecer. En cuestión de minutos, la temperatura puede descender varios grados, llegando a presentarse heladas en invierno.
Los atractivos turísticos de Toluca se encuentran diseminados por toda la ciudad y son un retrato de su historia, desde la época indígena y la colonial hasta la actualidad, como el jardín botánico, los tradicionales portales, los parques, museos, el estadio de La Bombonera, el Cosmovitral, que se extienden por la ciudad, hasta el pintoresco municipio de Metepec, ahora conurbado.